Roturas de cable de embrague

                                                                     Pregunta:                                                                     

Realicé el cambio de embrague en una furgoneta, y desde el principio estoy sufriendo continuas roturas de cable de embrague. El tacto del pedal es bueno, pero cada mes es necesario sustituir el cable por rotura, y ha sido necesario sustituir el cable en tres ocasiones. En la última rotura he procedido a cambiar el embrague por segunda vez, pensando que pudiera ser el causante del fallo. Pero para mi sorpresa, el vehículo ha vuelto a taller con el cable de embrague partido 10 días después. ¿Qué puede estar ocurriendo?

                                                                    Respuesta:                                                                    

La rotura repetitiva del cable de embrague parece estar motivada por la sobrecarga del componente. Pudiéramos encontrarnos una excesiva dureza para el desembrague, o bien un estiramiento excesivo del cable

Cuando este fenómeno ocurra poco después de montar el embrague nuevo, será necesario examinar el estado del sistema de accionamiento (horquilla de desembrague, casquillos de eje de horquilla, puntos de guiado del cable, etc.).

Cuando sustituimos un embrague viejo por uno nuevo, el diafragma permanece en una posición más hundida y más alejada del cambio de marchas. Entender esto es clave para detectar la causa de la avería. El cojinete por tanto, debe avanzar más para poder empujar al embrague, y por tanto también el sistema de accionamiento, que trabajará en un ángulo diferente.

En este caso no se ha apreciado dureza en pedal, por lo que pudiéramos trabajar con una hipótesis de la rotura por exceso de tensión. Después del cambio de embrague, el cojinete de empuje va a trabajar en la posición más alejada posible del cambio de velocidades, que es justamente la posición de máximo estiramiento del cable de embrague. Si en este estado añadiéramos un estiramiento adicional del cable por otras circunstancias, éste podría no compensar esa longitud adicional y se tensará en exceso al pisar el pedal a fondo.

Será necesario examinar un posible desgaste excesivo de la horquilla en la zona de contacto con el cojinete, o una deformación de la misma por el uso. El eje de horquilla o rótula de articulación, según vehículo, deberán ser revisados en busca de holguras. Por último, será necesario examinar los puntos de articulación o guiado del cable en la carrocería y posibilidad de defectos o incorrecta regulación del sistema del pedal de embrague.

fuente: repxpert.com