Como el embrague, los cojinetes de desembrague central están sometidos a un desgaste natural que no siempre puede
localizarse de forma visible con seguridad. Es imprescindible
tener en cuenta posibles fugas y/o daños existentes.
Por lo tanto, si sólo se repara el embrague, existe el
peligro de que poco tiempo después del cambio del
embrague el cliente tenga que realizar una visita innecesaria adicional al taller porque el defecto en el cojinete de
desembrague central no se reconoció a tiempo.
Es decir, una reparación profesional siempre supone
cambiar el plato de presión del embrague, el disco de embrague y el cojinete de desembrague central. No existe la
posibilidad de revisar el cojinete de desembrague central.
fuente:Schaeffler-aftermarket.es